miércoles, 7 de octubre de 2009

La ciencia española no necesita tijeras

Llegué a la universidad hace algo más de un año, pensando como todos los novatillos que de mayor iba a ser investigador. Una vez dentro empiezas a saber por los chicos mayores que el camino no es nada bonito, que en España no hay dinero para investigación, que hay que buscarse el futuro fuera, te torturan con el chiste aquél de "¿Qué le dice un físico con trabajo a uno sin trabajo?: ¿Lo quiere con patatas o sin patatas?". Y tampoco haría falta que nos lo contasen, hasta los objetos te lo pueden contar. En mi calorímetro del laboratorio de la facultad ponía "Tartera Niágara: Ideal para sus excursiones"...

Y lejos de arreglarse, ¡hala! al carallo. Como explica aquí Irreductible, el gobierno de España, en vez de apoyar la investigación, reducirá más sus presupuestos, todo serán más problemas. Me va a tocar emigrar, vamos.

No tengo nada que decir que no haya dicho nadie ya hoy en esta campaña, aparte de variar un poco la pataleta. La verdad es que me siento muy impotente, esto va de mal en peor, los gobiernos se suceden y pasan de la ciencia, y no tienen más que hacer una campaña en twitter
(#cienciasi) en ridícula ofensiva contra #tijerasno, que suena a pataleta de niño pequeño (ñañaña no te escucho me rebota y en tu culo explota)

En fin. Ah, un detalle ridículo más antes de acabar. Tiene un poco de guasa a mi parecer que la moncloa esté defendiendo su postura mediante su twitter, que funciona con internet, sistema creado para un propósito científico (en el extranjero claro), que conecta ordenadores, que funcionan gracias al transistor, que regulan el tránsito de electrones, que es ciencia. Y sus twitts van por fibras ópticas submarinas, reflexión total, óptica, física vamos. Y hablan por micrófonos, que convierten voz en señales eléctricas que acaban transmitiéndose por el aire y llegando a satélites y... Y algunos ministros tienen gafas... ¿Se me entiende no?